Friday, July 16, 2010

HACE UN AÑO



Hace un año que murió. En los periódicos apareció esta foto suya en el hospital, con Ryan O'Neal a su cabecera. Él, alcohólico, no fue un buen marido, como no había sido un buen padre. Se habló de malos tratos, violencia. Ahí está, a su lado pero incapaz de acompañarla, muy lejos, sin entender lo que sucede. Ella le mira, serena, ya cerca del final. Conserva algo de esa belleza juvenil que enamoró a toda una generación de americanos. (El proceso de la enfermedad quedó recogido en un documental, "Farrah Story" que se estrenó meses antes y fue candidato al Grammy).
Es una imagen llena de vida y llena de muerte, llena de impotencia y a la vez llena de plenitud. Yo he sido mirado de esa manera y he sentido ese alejarse, como cuando el tren en marcha emprende su viaje y nos quedamos diciendo adiós desde el andén. Tantas cosas se dicen en una mirada...Y Farrah Fawcett, en su fragilidad, es tan fuerte...tan bonita. Con esa clase de belleza que se no merece un destino de polvo y busca la eternidad.

3 comments:

  1. Farrah Fawcett, inmortal. Ryan O´Neal, cobarde.

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  2. Sí, de acuerdo, pero ¿no podemos tener piedad de los cobardes? Me identifico con la cobardía del sano -digamos- más que con la grandeza inalcanzable del enfermo. Un abrazo, brams.

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  3. Bellísima ante el cobarde (francisco dixit), espectador obligado de un drama que no reconoce como propio.

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