Sunday, June 11, 2006

MAESTROS

Sólo aprendo de aquello que me enfrenta. Mi maestro es el que me refuta. Si algo me molesta, ahí hay algo que aprender, creo yo. Si reacciono es que eso que me dicen me lo estoy diciendo yo antes. No seré entendido, ni se trata de eso. No seré querido, ni se trata de eso. No gustaré, ni se trata de eso. Este es mi rincón y aquí escribo. No sé si soy visitado o no. No se trata de recibir comentarios laudatorios, tampoco condenatorios. No se trata de tener en versión digital mis tonterías completas, ni de encontrar pareja o amigos por Internet (los tengo ya). Hoy me dicen que ejerzo un detestable (y por mí detestado) buenismo: el que ejerce de bueno, condena a los demás a la condición de malos. No es mi intención (creo ser lo bastante malo, en verdad). Me dicen que creo en los violentos, que soy de derechas (o de izquierdas, daría igual, es un cartel)...en realidad, he sido de todo y no soy de nada, creo en París, en la cultura, en Europa, en los viajes, en la palabra y la música...También en los surrealistas y en los juegos literarios. Pero escribir es difícil, comunicarse más, conocerse totalmente imposible. Qué más da lo que los demás piensen. Escribo para mí (y si acaso para tres o cuatro lectores amigos). Soy yo el que juzgo, el único control (muy amplio) de mi calidad. Soy yo el que vivo, y el que juego. Soy dueño de mí. Y, cómo no, los demás lo serán de sí mismos y de su opinión. No aspiro a la calidad literaria (mi única novela se vendió poco), no tengo ese filtro, ni creo que aquí (en los blogs) deba establecerse. Puede pasar a leer quien quiera, pero espero no venderme a mis visitantes, ni estar tan solo que acabe por escribir para ser leído. No quisiera ejercer una dignidad de cartón, pero sí una dignidad como persona que se muestra a los otros. Aspiro a sentirme a gusto y a expresarme con la posible autenticidad, a ir en mi propia dirección.
Pero cierto es que sólo aprendo de lo que me hace reaccionar (es la reacción la que me enseña). El "no" me baja a tierra, porque me duele. El "no", doliéndome, me dice dónde estoy (aunque lo sepa). La ausencia o el desdén, enseñan también. Como decía Nietzsche "lo que no acaba conmigo me hace más fuerte".

2 comments:

  1. Me he sentido identificada con tu texto. No hubiera expresado mejor lo que siento. Gracias por tu sinceridad y por hacernos partícipes de ella. Un abrazo

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  2. Anonymous12:09 PM

    Bueno exactamente Niestzche decía,
    " De la escuela militar del vivir:lo que no me mata me hace más fuerte".
    Es casi lo mesmo, pero...

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